Marzo 31 de 2013-03-31
Por: Luis Hermes Ruiz
De verdad, esta pelea esta para alquilar balcón; si bien es cierto que el Presidente que entra habla mal del que sale y éste a su vez del que entra, jamás habíamos presenciado algo parecido al tinglado: Uribe - Pastrana vs JMS. Quien lo creyera dos enemigos: Uribe y Pastrana, unidos por las conveniencias políticas; asómbrese y recuerde que JMS, fue Ministro de los dos de Pastrana, Ministro de Hacienda y de Uribe Ministro de Defensa; con el primero, sacó a delante la crisis económica que vivió el país y con Uribe, la Política de Seguridad Democrática, fue pues, un Ministro estrella.
Uribe, reniega de Santos porque al llegar al poder, no ha hecho las cosas como él, quería que las hiciera, olvidándose que ya no es el Presidente y porque nombró como Ministros a sus archi-enemigos: Germán Vargas y Juan Carlos Restrepo y además, porque no le ha cuidado sus: “tres huevitos”. Pastrana, porque le sacó en cara la entrega del mar territorial de San Andrés al no rechazar el Pacto de Bogotá y dar a conocer las Actas de la Comisión Asesora de Relaciones Exteriores.
Los dos quieren que los diálogos de Paz en la Habana, fracasen. Pastrana, que logró la Presidencia entregando el Caguán a las FAR, al expresar durante el proceso electoral, que alcanzaría la paz y hacer que su representante Víctor G. Ricardo se tomara una foto con Tirofijo; el pueblo, creyó que después de tantos años de sangre y desplazamiento, había que hacer cualquier cosa para alcanzar la paz. Uribe, como ya lo expresé, porque Santos, no le ha obedecido.
En cuanto a Pastrana, asombra la falta de conocimiento de la Constitución, diciendo que:” Santos no tiene el mandato para la paz” y que, el pueblo no le ha dado el mandato. Yo, que soy un modesto profesor de Constitución, quedé asombrado pues aún mis estudiantes de primer semestre, saben que el artículo 22 de la CN expresa: “ la Paz es un deber y es un derecho de obligatorio cumplimiento”; luego en el articulo 95/6 ”Propender el logro y mantenimiento de la paz y en el articulo 2 considera: “ Asegurar la convivencia pacífica ...” ; más adelante: “Las autoridades de la República están instituidas para proteger a todas las personas residentes en Colombia …”, es un mandato Constitucional que obliga la Presidente a buscar la sana convivencia.
Lo que JMS, viene haciendo frente a los diálogos de paz, cuenta con el respaldo de toda la Iglesia Católica que por orden de su Santidad, dedicó en todo el país, su discurso de Semana Santa a respaldar los Diálogos de Paz, cosa que viene haciendo la mayoría del pueblo colombiano y muchos países del mundo incluido EE.UU; y es que después de más de cincuenta años de lucha armada, desplazamientos forzados, desapariciones, torturas y cientos de miles de muertos, los colombianos estamos cansados y queremos que nuestras próximas generaciones, tengan un espacio de tranquilidad bajo el sol de Colombia y si bien es cierto, para alcanzar esa paz es necesario ceder, no podemos olvidar que todo proceso de paz negociado pasa por este fenómeno ya que cada parte cree tener la razón de su lucha. La paz alcanzada en Nepal (2008), Guatemala (1.996), el Salvador (1991), en Suráfrica con Mandela y Deklerk (1.990), son muestra que en una paz negociada todos tienen que ceder.
Los costos de la paz, siempre serán altos por todas las familias que han sufrido la pérdida de sus seres queridos, el abandono de sus tierras, de su forma de vida, los desplazamientos, las torturas, etc., entonces hay que buscar otros caminos como la reparación, la búsqueda de la verdad y aplicación de una justicia transicional y el cómo alcanzar la convivencia después del posconflicto; ese es el costo que hay que pagar y si por ello tenemos que ver a los alzados en arma posteriormente haciendo política, bien en el gobierno o bien en el congreso, eso, también forma parte del costo; ya ocurrió con el M-19, quienes, formaron parte de la Asamblea Nacional Constituyente, que nos dió la Constitución de 1.991; que llevó a Navarro Wolf a Ministro, Gobernador, Congresista; Gustavo Petro a Congresista y Alcalde de Bogotá; Rossemberg Pabón Pabón , Alcalde de Yumbo y a otros, en diferentes posiciones. Frente al proceso de paz, lo que hay que buscar es que el ELN, también negocie la paz y que a más de hacer política, se logre que todos ellos, tengan espacios de trabajo a fin de evitar que se conviertan en nuevas bacrines o narcotraficantes lo cual sería muy peligroso para el proceso y para un País que quiere la sana convivencia, máxime cuando no hay cárceles suficientes para recluir tanto bandido.